Ronda y Cortés de la Frontera
El pasado marzo estuvimos de fin de semana juntos en Ronda y Cortes de la Frontera. Fue una actividad solo para los adultos, donde participaron 4 personas sordociegas y 4 voluntari@s.
Teníamos ganas de visitar a uno de nuestros socios y un gran amigo que reside en Ronda. Por ello nos desplazamos hasta allí el sábado, para que él mismo fuera quien nos enseñara su ciudad. Paseamos desde la famosa Calle de La Bola por todo el centro hasta llegar a los miradores del Tajo, parándonos en los monumentos más conocidos y en la Plaza de Toros. Nuestro compañero nos iba contando anécdotas sobre uno de los pueblos más bonitos de la provincia de Málaga.
Después de comer en uno de sus restaurantes más céntricos, pasamos por el supermercado a hacer una compra común para la casa donde nos íbamos a hospedar y al finalizar, continuamos carretera hasta llegar a la siguiente parada, Cortes de la Frontera.
Una vez allí, llegamos a la casa de un familiar de nuestro voluntario Manuel, que nos habían dejado solo para nosotros. Preparamos las habitaciones y continuamos con nuestro día turístico. Paseamos por la calle principal visitando la Plaza de Toros a la que tuvimos la suerte de poder entrar, también el Ayuntamiento de Carlos III y otros puntos de interés.
Cenamos en una famosa pizzería del pueblo, ¡todo riquísimo! Y nos animamos a tomar algo en un Pub antes de ir a descansar.
El domingo amaneció con algo de lluvia. Preparamos un desayuno en casa entre todos y todas para cargarnos de energía y seguir aprovechando. Visitamos el Parque de las Camaretas y el Helipuerto, donde disfrutamos de unas maravillosas vistas de los parques naturales de Los Alcornocales y Sierra de Grazalema.
Para finalizar el viaje, comimos en un gran mesón y después vuelta a casa con parada en Ronda para despedir a nuestro compañero. Nos lo hemos pasado en grande, esperamos volver el próximo año,
Día en la piscina
Sábado, 15 de junio de 2019
Aunque nuestra idea inicial era un día de playa, el viento de levante nos lo puso difícil. A punto de tener que suspender nuestra actividad, una de nuestras voluntarias y amigas, Irene, nos ofreció pasar el día en su piscina, y el plan no pudo ser mejor.
Nos sentimos como en nuestra casa, disfrutamos del agua, de juegos con las colchonetas, ¡y hasta tenía tortugas! Además de todo esto, de postre, nos invitaron a helados caseros hechos por su familia que se dedican a ello. ¿Se puede pedir más? ¡Pues sí! Por último, el padre de nuestra amiga les dio un paseo en motocicleta a los adultos que acabaron encantados con la experiencia.
Gracias por todo Irene y familia, esperamos volver a vuestro hogar.
Visita al parque de atracciones Tivoli World
Bueno, esta es nuestra última actividad de la temporada, y nos gusta siempre acabar a lo grande. Para despedirnos hemos elegido este año echar el día juntos en el parque de atracciones Tivoli World.
Fuimos un total de 6 participantes, 7 personas voluntarias y una coordinadora.
No podíamos pedir más para un gran día como este. Desde que nos montamos en el tren que nos llevó hasta lo más alto del parque no paramos de disfrutar de todas y cada una de las atracciones. Una de las que más nos gustó, sin duda, fue la montaña rusa; nos montamos unas diez veces a petición de los participantes. ¡No nos cansábamos! Pero además, coches de choques, tren de la bruja, gusano loco, paseo por el interior de un barco lleno de sensaciones sensoriales… ¡No paramos!
Tanto es así, que nos dieron las 11 de la noche, y llegó la hora de despedirnos, esta vez bien fuerte porque nos esperan unos meses de descanso de actividades, pero volveremos… Como siempre…MÁS Y MEJOR.
Arantxa