Nos escribía Arantxa en abril:

Volvemos con una nueva actividad para la familia malaguita.

En esta ocasión, asistimos un total de quince personas; siete participantes sordociegos, siete voluntarios y una coordinadora.

Necesitábamos una actividad relajada donde poder conocernos un poco mejor. Así que visitamos el Jardín Botánico-Histórico de Málaga, La Concepción. Un jardín que forma parte de esta ciudad desde hace más de ciento cincuenta años.

Contamos con un guía, David, que nos explicó algunas curiosidades sobre la historia del jardín y sobre los tipos de plantas. Fue muy paciente con nuestro grupo, dejando que se tomaran el tiempo necesario para explorar cada rincón. Además, nos enseñó diferentes texturas de los troncos de árboles y una inmensa variedad de olores.

Al finalizar la visita guiada, aprovechamos para dar un pequeño paseo por nuestra cuenta. Después, buscamos la zona de picnic para hacer un desayuno todos juntos. Pero, sobre todo, para celebrar una ocasión muy especial…¡El cumpleaños de nuestro Alexander!

Tomamos zumos, batidos, picoteo variado y, por supuesto…¡TARTA! Los compañeros entregaron algunos regalos al anfitrión que le encantaron.

La mañana se nos pasó volada, cuando quisimos darnos cuenta, era hora de marchar…

Así que, como siempre, nos quedamos con ganas de MÁS y de MEJOR.