Han pasado unos días intensísimos, en los que han conocidos a unas familias y chicos volcados en aprender y conocer cosas nuevas. Muchas horas de charlas, coloquios, juegos, y convivencia con unas personas encantadoras. Los más directamente implicados, dos chicos con sordoceguera y otros con discapacidad auditiva o visual, y sus familias. Padres, madres, profesoras y niños y niñas aprendiendo lengua de signos, formas de comunicación, participando en clases y juegos, y dando lo mejor de sí. Todos eso acompañado de las sesiones de valoración, tanto de nuestra doctora como de nuestras expertas en sordoceguera.
Plenamente cumplido el programa: «Sordoceguera y dificultades asociadas: problemas de comunicación y conducta.» Y paralelamente: «Jornadas teórico-prácticas de identificación de patología neuropediátrica, asesoramiento clínico y posibilidades de intervención educativa«.
Nuestro equipazo vuelve feliz de estos días, y con ganas de repetir.
¡Bienvenidas y enhorabuena, Guinea está mucho más cerca ahora!