Fantástico fin de semana en la Granja
Los días 31 de mayo, 1 y 2 de abril de 2017 un total de 6 participantes con sordoceguera, acompañados de 11 voluntari@s y una coordinadora disfrutaron de un fantástico fin de semana en la naturaleza.
Nos lo cuenta Verónica:
Repetimos a la Granja, porque aunque lejos para todos, sin duda el espacio y su gente nos enamoraron la primera vez que fuimos.
Esta vez decidimos marcharnos un viernes, precisamente para que la jornada del sábado resultase aprovechable al 100%. Llegamos por la noche el día 31, nos ubicamos y tras la cena nos fuimos a dormir…a algunos les costó meterse en la cama y ¡a otros quedarse dormidos!
A la mañana siguiente preparados para empezar la jornada, un grupito acompañó a Jorge a darles el desayuno a los animales, volvimos para un buen desayuno y a seguir tras las ovejas, las llevamos a pastar y después cogimos la lana que previamente les habían cortado. Con esta lana nos fuimos a la “palleira”, un espacio chulísimo en el que trabajaríamos limpiando la lana, cardándola, enrollándola, hilándola y por último realizando una libreta con cada uno de los procesos, que después nos llevamos para casa.
Comimos y para el tiempito de descanso, algunos pasean, otros juegan, otros se tiran en los sofás…tras este momentito, nos fuimos para terminar con la lana, cómo realizar un bolo de lana natural de colores. Y lo que parece fácil requiere de tiempo y técnica, y ¡qué bien lo hicieron nuestros chicos! Con una alfombrilla mojada tuvimos que voltear y voltear una bola de lana de colores enjabonada…fue divertidísimo para estas primeras horas de la tarde, enrollar y enrollar, algunas salían volando, otros acabaron con el pelo blanco de la espuma…en fin que la actividad ¡dio para mucho!
Cuando finalizamos merendamos, y tras la despedida a Martina y alguna monitora, nos pusimos camino de una granja de vacas que está a un kilómetro de Barreiros. Un paseo chulísimo en un día muy agradable.
Las vacas impresionaron a todos, pudimos verlas en las cuadras, tocar a los terneros y darles de comer. Pero impresionante fue meternos en el foso desde dónde se ordeñan las vacas, participamos en directo y de forma activa a la recogida de la leche. Las limpiamos con las mangueras, los paños, y pudimos ordeñarlas. Unos propietarios encantadores a los que el agradecimiento se quedó corto.
Nos llevamos leche de las vacas, con la que al día siguiente elaboraríamos un queso riquísimo.
Según fuimos llegando al albergue, las fuerzas aflojaban, así que ducha, cena reconstituyente, y la mayoría ya a dormir…¡menos alguno que otro que se resistió!
Esta noche no se escucharon más que ronquidos…y al que más y al que menos nos costó despertar, la jornada del sábado fue completita.
Por la mañana los que quisieron fueron a darle de comer a los animales, sacar los cerdos, el caballo…y empezamos con la elaboración del queso. Preparamos la leche y el cuajo, y como necesita un tiempo con calor para cuajar, nos pusimos en marcha hasta una finca contigua a la granja, en la que habita un árbol maravilloso y muy mágico. Podemos subir por detrás y trepar por el hueco central que el tiempo ha ayudado a formar. Paseando de vuelta para realizar nuestro queso, recogimos almendras…muy divertido y les encantó a todos.
Continuamos con la elaboración del queso, y la verdad que mejor organizado no podía haber estado, nos colocamos en cadena y todos hacíamos de todo, ameno, muy vivencial y sobre todo divertido. El resultado final estupendo, un buen queso que, tras un poco de frío, al mediodía comeríamos como postre acompañado de miel o mermelada casera de grosellas.Y todo lo bueno se acaba, tras la comida la despedida y cada uno a nuestro destino.
Fue un fin de semana lleno de experiencias muy intensas para nuestros chicos, para nosotros, conocimos a monitores nuevos y esto siempre aporta pilas al grupo.
Repetir en Barreiros es un placer, porque el espacio es comodísimo, los monitores no pueden ser mejores y todo lo que ofertan es tan vivencial y real que a nuestros chicos les llega desde lo palpable, desde lo vivencial y con procesos completos. El animal, cortamos la lana, hilamos, teñimos y realizamos la bola. Y con el queso el proceso completo, visitamos las vacas, llevamos la leche y con ésta realizamos el queso que no comemos. ¡¡EXCELENTE Barreiros!!Mencionar a los monitores, Jorge y Ana es obligado, cada año se atreven más, signan con ellos, los cogen, les explican, estamos nosotros, pero ellos no dejan de hacerlo. ¡Un diez!
GRACIAS
El personal de la cocina maravilloso, siempre atento y preocupado de si todo está bien. Tenemos que mencionar al perro, a Valentín, el alma de la Granja y el bonachón al que todos achuchan, acarician y al mismo tiempo respetan.
Como siempre, lo mejor ellos, los chicos y chicas, niños y niñas que cada salida nos hacen estar alerta, porque cada paso, mirada, comunicación dirigida o espontánea, nos demuestra que dentro hay mucho, de calidad y de verdad, que puede llegar a que olvides todo lo demás. GRACIAS
Los monitores una pasada, repiten y repiten, se adaptan a cada chico sin problema, siempre con buena cara y ganas de hacer de cada actividad una nueva experiencia.
Las familias por lo que decimos siempre, la confianza, el agradecimiento y esas palabras, mensajes de ternura y cariño que siempre nos hacen llegar. GRACIASAPASCIDE es el motor, es el soporte y como no el facilitador en todos los aspectos, así que GRACIAS cómo no!
¡¡Y como una imagen vale más que mil palabras…adjunto fotos!!